El cantautor español presentará en Lima el concierto, "Vinagre y Rosas", que se realizará en la explanda del Jockey Club del Perú

Redacción Oxigeno
El cantautor español Joaquín Sabina llegó a las 23.00 horas de ayer a Lima, proveniente de la ciudad de Quito (Ecuador), informaron hoy los organizadores del evento. Esta tarde decidió entregarse a los placeres que le provoca la comida peruana cada vez que regresa a nuestro país.

El arribo a la capital para su concierto Vinagre y rosas, en el Jockey Club del Perú mañana (martes), lo hizo junto a su esposa de nacionalidad peruana y su staff personal.

Según trascendió, Sabina almorzaría hoy en un conocido restaurante de Gastón Acurio, puesto que deseaba rendirse a los encantos y sabores de la gastronomía peruana, tan afamada a nivel mundial.
Respecto a la venta de las entradas, se informó que están casi al 100 por ciento vendidas, es decir, se espera que mañana asistan cerca de 10 mil personas al show del cantante.

El disco que presentará en esta ocasión es considerado un obsequio para el oído después de un lustro de silencio fonográfico, que Sabina atribuye a los viajes y giras que ha debido realizar en los últimos años y cierta estabilidad doméstica que lo mantiene a raya de sus antiguos descalabros existenciales y sentimentales.

A sus sesenta clavados años, es la oportunidad además de ver a Sabina despidiéndose de los grandes escenarios, según ha anunciado. No más conciertos "industriales".

Esta faena de despedida, viene precedida de 16 conciertos en España entre noviembre y diciembre del 2009; y 29 conciertos en menos de seis meses del 2010, nueve de ellos de un tirón en México y otros nueve en tres tiempos en Argentina, dejando a Lima como broche de oro para la sección latinoamericana.

ANDINA