Jay Weinberg, baterista de la banda norteamericana Slipknot, recordó sus inicios en los escenarios junto al icónico Bruce Springsteen.

Baterista de Slipknot agradece a Bruce Springsteen por primera oportunidad en los escenarios: “Fue una lección de vida”

El baterista de la reconocida banda estadounidense Slipknot, Jay Weinberg, volvió a reflexionar sobre sus comienzos en el mundo del rock, y recordó el día que le pidieron sustituir a su padre como batería de gira del mítico cantante Bruce Springsteen & E Street Band hace quince años.

Aprendizaje profesional

El músico de 32 años compartió en sus redes sociales una fotografía de un concierto junto a Bruce Springsteen. “¡Estoy tan emocionado de que solo falte un mes para ver a mi familia de E Street tocar por primera vez en seis años! Lo he dicho a menudo, pero estoy eternamente agradecido a @springsteen, @mightymaxweinberg y a toda la E Street Band por arriesgarse conmigo cuando tenía 18 años”, decía el mensaje que acompañaba la imagen.

Weinberg también confesó que quedó muy sorprendido al conocer la ética de trabajo de E Street Band. “Fue una curva de aprendizaje vertical que me dejó lecciones de vida y un conjunto de habilidades que he aplicado a todo lo que he hecho desde entonces”, dijo.

Recuerdo imborrable

El baterista de Slipknot contó más detalles sobre la primera vez que sustituyó a su padre en la E Street Band: “Yo era el último chico de toda la gente de E Street Band. Me daba un miedo mortal subirme al escenario. Había terminado el instituto y ese verano tocaban en el Giants Stadium de Nueva Jersey. Era el antiguo Giants Stadium, antes de que lo derribaran y construyeran uno nuevo. Mi padre me dijo: 'Deberías tocar una canción con nosotros en la prueba de sonido'. Y así lo hice. Y Bruce estaba, como, 'Hey, eso fue bastante bueno. ¿Por qué no tocas eso esta noche durante el show?' Así que toqué la canción ‘Born To Run’ con ellos esa noche, y fue genial”, comentó Weinberg.

Además, Jay rememoró su primera performance junto a Springsteen en agosto de 2008: “Fue un momento de lucha o huida, todo se paraliza. Tocamos la canción y creo que a la gente le gustó. Pero, sí, eran como 70 mil personas o algo así. No parecía real, parecía como si estuviera viendo una pantalla de televisión o algo así. Creo que eso ayudó, era tan ridículo de ver que creo que ni siquiera pude procesar que era algo que estaba pasando de verdad”, mencionó.