Si eras un adolescente durante los años 2000s, seguro recuerdas algunos de estos programas que cautivaron a millones de televidentes de todo el mundo.

realities de mtv | Fuente: theodysseyonline.com
Redacción Oxigeno
MTV fue una de las cadenas televisivas más importantes en los noventa. En los 2000, mantuvo su liderazgo, aunque restando el énfasis a la música e innovando en formatos de reality shows que cautivaron a miles de adolescentes en todo el mundo. 

Aquí te recordamos siete de los programas de televisión más populares del canal por aquellos años. Si eras un adolescentes en los 2000s, seguro los recordarás. 

Parental Control

 

Los padres no estaban conformes con la pareja de su hijo o hija, por eso, hacían una selección de chicos o chicas que pudiesen interesarle, promovían una cita y buscaban que estos conquisten el corazón de sus hijos frente a la pareja rechazada, que veía todo a través de un televisor.

Sweet Sixteen

 

Porque los quince años de America Latina son los Sweet Sixteen de los Estados Unidos. Las mejores fiestas y regalos que puedan imaginar para los engreídos del país del norte.

 

Rooms Raiders

La mejor manera de elegir una pareja es analizando cómo luce su cuarto. Esa es la premisa del programa, que secuestra a 3 personas por sorpresa de sus casas, para subirlas a un bus a ver cómo un chico o chica revisa la manera en la que viven. 
 
 

Next

Chicos o chicas en un bus esperando para conocer a una persona que esta abajo y que quiere pasar un buen rato. La idea es que te pida una segunda cita, pero si no lo hace, te vas con el dinero equivalente al tiempo que duraste. 
 

Exposed


Sucedió a Next. Era una cita pactada en la que un amigo se escondía en un carro cerca con un detector de mentiras. A través de un auricular decía qué afirmaciones del participante eran ciertas y cuales no, dejándolos expuestos. 

 

Pimp my ride

Carros viejos que son restaurados por un grupo de profesionales. Es increíble ver los resultados. Muchos dueños ni siquiera reconocen sus máquinas.  

Punk'd


Ashton Kutcher deja su lado de sex symbol y se convierte en un bromista, que hará pasar malos ratos a muchos famosos.